Deïr el Qamar

El pueblo de Deir el Qamar, situado a unos 800m sobre el nivel del mar, se encuentra en realidad relativamente cerca al Mediterráneo pero a su vez se sitúa en una zona de montaña de la cordillera central del Líbano.

Es un pueblo con encanto, de estos con pavimento empedrado, compacto, con sus iglesias y sus casas de piedra... bien podríamos estar en cualquier lugar del interior de España, aunque aquí es donde terminan las similitudes, pues en realidad la plaza central está dominada por una antigua mezquita.

Si quieres ver algo bastante peculiar, en las cercanías tienes el Castillo de Moussa, una verdadera obra de arte que tardó más de 50 años en construirse y que parece salida de la mente de un arquitecto muy ingenioso por la forma como encajan todas sus piedras de tamaños dispares para formar un conjunto estéticamente muy potente. Aunque para gustos los colores, es una visita interesante aunque algo cara si quieres entrar y escuchar la historia que hay detrás y ver la exhibición de la vida tradicional libanesa y el museo de armas de todo el mundo que hay en su interior.

Otra obra de arte arquitectónica es el Palacio de Beiteddine, también cercano a la zona, construído a finales del siglo XVIII por un emir de la dinastía Shihab, aunque fue luego ocupado por otomanes y franceses y resultó muy dañado durante la Guerra Civil Libanesa.